Estoy cada día, entre escribir de emociones y de algunas fantasías. Entre discursos sin espectadores y ensayos como borrador.
Estoy escribiendo un artículo sobre el corazón, pero referencias me faltan porque no encuentro nada interesante, más que todo este dolor.
Estoy frente a una caja mágica que hace grabar mis memorias, mis suspiros y uno que otro tormento. Estoy dialogando con ella, entre mi soledad y mi pasión.
Estoy escribiendo, pero ya no escribo mucho del amor. Estoy en pausa, estoy juntando las palabras, los sentimientos y los desvelos para aquello que en verdad me inspire, me inspire a ser yo.
Escribo, es lo que se hacer, no muy bien, pero te pido que mientras leas este escrito, tu caja mágica no te haga pestañear.
V. M. G. N.
